Soy Magalí Maffrand. Argentina, psicóloga, emprendedora, mamá de Abril y mamá humana de More (mi perra).

Soy amante de los pequeños placeres: la comida agridulce, el mar, los aromas… y los momentos con sentido.

Vengo de una familia de emprendedores. Mi hermana Mica —mi compañera de vida y de negocios— lidera hoy Samsa Aromas en Chile creada hace 5 años, y mis hermanos varones se dedican a la gastronomía entre Argentina y México, donde también tuve en sociedad con ellos mi propio restaurante de pastas. Siempre fui muy viajera, y siempre fui de las que se animan.

En 2020, en plena pandemia cuando nos mudamos de Mexico a Chile con mi compañero Guillem, el cuerpo me dijo basta. Una alergia me obligó a frenar. No podía ejercer como psicóloga ni encontraba trabajo. Y ahí fue cuando, desde el caos, empezó algo nuevo. Empecé a buscar formas de reconectar conmigo. 

Hacía yoga, cerámica, y quise armar un altar en casa. Pero al buscar velas ecológicas, no encontraba,  solo había opciones con parafina.

Así nació Samsa: primero como una solución personal, y después como un proyecto que transformó la vida de muchas más.

Durante cuatro años construimos en Chile una comunidad hermosa con Samsa Aromas, acompañando a más de 3000 mujeres emprendiendo con propósito en el mundo de las velas y los aromas. Formamos un equipo de 10 mujeres trabajando con amor, empuje y una misma visión: que los aromas y el hacer con las manos pueden transformarnos.

En marzo de 2024, nos mudamos con Guillem a Barcelona, para estar cerca de su familia (de Mataró) y vivir la experiencia de ser padres, después de mucho desearlo.

Y aunque mi idea no era volver a emprender en ese momento… a veces, los proyectos te eligen a vos.

Acá, volví a ver lo mismo: mujeres que corren todo el día, que maternan, que cuidan, que resuelven.
Y que se olvidan de ellas mismas. Que no necesitan más teorías sobre espiritualidad, sino una excusa real para frenar un ratito y volver a habitarse.

Así nació Samsa Candle, al mismo tiempo que nació mi bebé Abril, en diciembre de 2024.

Una marca sencilla, honesta, cálida y práctica. Que no busca venderte algo, sino invitarte a estar con vos. A regalarte tu propia presencia.

Porque en un mundo que todo el tiempo nos apura, creemos que una vela también puede ser un refugio.Y si con Samsa logramos acompañarte a darte ese espacio —aunque sea de a ratitos— entonces todo esto tiene sentido.